viernes, 12 de octubre de 2012

Y aquí comienza




Como que de un momento a otro te das cuenta que te gusta mucho tu vida y lo que estás viviendo en ese momento y te acuerdas de todo y piensas que deberían hacer una película con tu vida –no una de acción ni una muy cabezona, sencillamente un drama simplón que más de algún espectador querría bajarla de internet y verla gratis un domingo nublado- o que deberías escribir acerca de ella para acordarte más adelante y leerte como sonabas en ese tiempo, burlarte de ti misma quizás o pensar si, en realidad he sido feliz. Y cuando llegas a los 30, o treinta y tantos –para qué entrar en detalles superfluos- notas que más encima, estás en la mitad de la carrera y que si no es ahora cuando cumples tus sueños, no será más adelante. El futuro que toda tu infancia te imaginaste es ahora y no tienes que esperar más. El tiempo llegó. Así de frentón. Como que uno pasa de ser una niña que juega con barbies a una treintona y no te das cuenta qué pasó entre medio. Todo fue muy rápido. Ahora empieza tu vida y debes vivirla lo más que puedas. 

Así que aquí comienza mi catarsis personal por mi vida –una vida normal y fácil pero mi vida, la que más me gusta- el recuento de un viaje impreciso a través de vivencias, recuerdos, tiempos y sueños que cumplir.  

jueves, 21 de junio de 2012

Nariz de gato

  
No existe nada más bello, sutil y armonioso que una fina y bien delineada naricita de gato. Y no hay nada que me guste más que esa nariz, altiva y soberana, en el animal más perversamente lindo y único, como lo es el gato. 

Esa es la razón de la elección del nombre de mi blog, que he abierto para escribir básicamente sobre mi prematura vida de viajera. Sí sé, no juntan ni pegan ambas cuestiones y sé que intentar hilar incluso una precaria conexion entre ellas resulta totalmente absurdo, pero es mi blog, son mis viajes y esa nariz era de mi gato, mi compañero por años, y es algo que voy a recordar y admirar de aquí al infinito aunque ya no esté a mi lado.  


Mi Gandalf